domingo, 21 de septiembre de 2014

Odio

Odio cuando escucho todas esas canciones que me recuerdan a ti.
Odio cuando mi cabeza comienza a darle vueltas a todo.
Odio que me vengan imágenes juntos a mi mente.
Odio que mi corazón se pare al escuchar las melodías de esas canciones.
Odio tener ganas de hablarte.
Odio tener que luchar por no buscar cómo estas.
Odio cuando entiendo todas las letras de las canciones que antes no entendía.
Odio estar así por ti.
Odio obligarme a escuchar todas las canciones.
Odio tener que permitirme meterte en conversaciones para aprender a vivir con todo esto.
Odio tragar saliva y mirar a otro lado para superarlo.
Odio ver a todas esas parejas y no verte ni a ti ni a nadie a mi lado.
Odio que se me derrame la primera lágrima que me obliga a dejar de hacer lo que estuviese haciendo porque me remueve todo lo pasado.
Odio obligarme a buscar apoyo en otras personas para no pensarte.
Odio tener que guardar silencio por todo esto.
Odio parecer estúpida con todo esto.
Odio sentirme vacía y admitir que te echo de menos.
Odio admitir todo lo dicho.
Odio saber con exactitud el tiempo que llevamos separados.
Odio acordarme de todas las fechas clave.
Odio haber escuchado todas aquellas palabras que un día dijiste.
Odio pensar que son verdad.
Odio creer que soy tal y como un día dijiste.
Odio poder seguir diciendo mil cosas más y por tanto:
ODIO TODO

                                      ~ Lucía Vaz ~

lunes, 3 de marzo de 2014

Si te demuestran

Sabes que un amor es mutuo cuando ambos buscáis hablar, un día uno y el siguiente el otro. Cuando ambos os demostráis amor y respeto. Cuando esperáis y ansiáis el momento de veros y estar juntos.

Debéis demostrar las cosas con hechos, porque las palabras se las lleva el viento. Por eso, al principio puedes temer sentir esas mariposas en el estómago, temes el que no sea algo mutuo o que la otra persona no se lo tome en serio y no quiera nada realmente.

Por todo esto debo deciros que si te demuestran sus sentimientos, no tengas miedo. Sólo debes temer enamorarte de una persona si se contradice, es decir, si un día te habla para decirte cosas bonitas, y al día siguiente, hace como si no existieses.

~ Lucía Vaz ~