Todo parecía un cuento donde todo era perfecto. Yo era la princesa que siempre como todas las niñas quieres ser; él era mi príncipe azul. Juntos sentíamos que nada podría separarnos y que juntos todo conseguiríamos, hasta que aquel día apareció el otro...
Quisiera pedirte perdón, por aquella TONTA gilipollez que hice... te lo he pedido un millón de veces, pero nunca me escuchas... No sabes cuánto duele el saber que si hoy no estamos juntos es por mi culpa.
Si hubieses cambiado ese tal vez por un simple SÍ, quizás todo fuese distinto ahora. Pero hoy digo que es muy cierto aquella expresión que dice: "Ayer, no te valoró, hoy, te perdió. Y lo más seguro es que mañana te va a extrañar", sí es totalmente cierto, por no valorarte, te perdí y ahora te extraño, porque como tú no hay nadie.
Tus brazos eran mi castillo, tu corazón mi cielo y tus ojos mi mar... pero ahora, ahora, no tengo nada, sólo mi lamento por perderte aquel oscuro día de invierno, en aquel banco dónde siempre quedábamos para vernos.
No sabes cuánto llega a doler el pasar todos los días por NUESTRO banco y sentir un pinchazo en mi corazón y al cerrar lo ojos verte ahí, esperando a que yo aparezca, y al abrir los ojos me diga a mí misma: "tonta él ya no está, se olvidó de ti, no te lo mereces". Aún te sigo teniendo en mi mente y siempre estarás.
Sigo escribiendo como una adolescente que en las páginas traseras de los cuadernos dibuja y escribe millones de corazones y frases de amor dirigidas a ti. Sigo siendo esa niña estúpida que se hace la tonta para que me digas lo que realmente quiero escuchar y no tener que imaginármelo. Sigo siendo aquella niña de ojos marrones que al mirarla a los ojos de ponía colorada. Sigo siendo esa chica que conociste aquel verano y que como niños pensábamos que estábamos siempre solos y los demás nos daba igual. Sigo pensando que eres mi príncipe azul y sigo pensando que algún nos volveremos a encontrar y todo volverá a ser como antes.
Aún cuando paso cerca de tu casa me entran unas ganas inmensas de llamarte para hablar, pero sé que tú no quieres verme, sé que te mereces alguien mejor. Me han dicho amigas mías que te ven mucho con una chica muy guapa y que me has olvidado. Sin embargo, mi corazón se niega a admitirlo y sigue y seguirá luchando por ti.
Sigo escribiendo como una adolescente que en las páginas traseras de los cuadernos dibuja y escribe millones de corazones y frases de amor dirigidas a ti. Sigo siendo esa niña estúpida que se hace la tonta para que me digas lo que realmente quiero escuchar y no tener que imaginármelo. Sigo siendo aquella niña de ojos marrones que al mirarla a los ojos de ponía colorada. Sigo siendo esa chica que conociste aquel verano y que como niños pensábamos que estábamos siempre solos y los demás nos daba igual. Sigo pensando que eres mi príncipe azul y sigo pensando que algún nos volveremos a encontrar y todo volverá a ser como antes.
Aún cuando paso cerca de tu casa me entran unas ganas inmensas de llamarte para hablar, pero sé que tú no quieres verme, sé que te mereces alguien mejor. Me han dicho amigas mías que te ven mucho con una chica muy guapa y que me has olvidado. Sin embargo, mi corazón se niega a admitirlo y sigue y seguirá luchando por ti.
~Lucía Vaz~
